No querras saber lo que guardan los rincones de este amasijo de neuronas, quizas te lleven a la locura, quizas a la muerte, quizas a la gloria. Elije con cuidado

23 noviembre 2010

siete mil años de uso y ninguna muerte

Siete mil años de uso y ninguna muerte


La convivencia del ser humano con la Cannabis Sativa (Marihuana), existe desde hace por lo menos 10 mil años, simultáneamente al descubrimiento de la agricultura en el Viejo Mundo.
Esto se debe a que la planta presenta cinco formas básicas de aprovechamiento: fuente de fibra de cáñamo, aceite, semillas utilizables como alimento, propiedades psicoactivas, y tratamiento de una amplia variedad de enfermedades.
Tal vez sea hora de preguntarnos por qué un recurso natural tan aprovechable y beneficioso está tan mal visto en nuestra sociedad.
Esto nos remonta al concepto de "droga". Hoy en día, la palabra "droga" tiene una carga semántica negativa, de condenación, miedo y curiosidad morbosa.
“Droga” –vocablo de etimologia contradictoria- supo designar solamente a productos que la naturaleza ofrece para la producción de tinturas y/o medicamentos. Sin embargo, en griego -pharmakon- significa remedio y veneno, lo mismo ocurre en la lengua inglesa, -drug- donde el término sirve tanto para referirse a remedio como a veneno.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) definió: "dependencia de droga es el uso habitual y compulsivo de cualquier droga narcótica, de manera que amenace la seguridad y el bienestar del propio cuerpo o de terceros". "Cualquier droga narcótica", pero "narcótico" es un término genérico que designa una sustancia que produce estupor o letargo y que puede, incluso aliviar o suprimir el dolor. En el caso de la cocaína, por ejemplo, su absorción produce euforia, fuerte excitación cerebral e hiperactividad física. Por otro lado, el alcohol que puede provocar hasta coma e intoxicación seguida de muerte, jamás fue llamado
"narcótico", por ser una de las drogas sacramentadas por la civilización occidental y cristiana.
Para aumentar la confusión surge la palabra "tóxico" que significa "veneno" pero que adquirió un sentido tan amplio como el de la palabra "narcótico". Droga y tóxico son palabras hermanas bajo el mismo estigma: Cannabis es sinónimo de horror, delincuencia; cigarrillo, de elegancia, buen gusto. Alcohol, según la OMS es alimento. Claro que esto sucede en el contexto de una trama urdida por los intereses del sistema. Tal y como dijo Thomas Szasz "La marihuana y la heroína la venden los traficantes; los cigarrillos y el alcohol lo venden los comerciantes"
Los medios de comunicación, que destacan la prisión de usuarios consumidores de Cannabis son patrocinados por millonarias campañas publicitarias de cigarrillos. La sociedad combate y pena el uso de "la hierba maldita", en cambio permite que se realicen campañas millonarias anunciando de forma amplia e incisiva el consumo de bebidas alcohólicas. Mientras que no se han registrado problemas causados por el consumo de Cannabis, los alcohólicos se multiplican por el efecto fermentador de la miseria y los beodos van perdiendo sus vidas, tal como nos demuestra las estadísticas realizadas por La asociación NACE (No a conducir ebrio):

# El alcohol sigue siendo el factor más grande relacionado con muertes en fatalidades automovilísticas.
# Solamente el 7% de todos los accidentes automovilísticos son relacionados con el uso de alcohol, pero casi el 39% de accidentes automovilísticos fatales son a causa del alcohol.
# Los accidentes automovilísticos es la causa más grande de muerte de individuos entre los 6 y 33 años.
# Es estimado que suceden 2.6 millones de accidentes automovilísticos causados por el alcohol cada año, el cual 4 millones de víctimas quedan perjudicados o lastimados.

A pesar de estos datos más que evidentes, los medios de comunicación están atestados de campañas publicitarias promoviendo el alcohol y su consumo.

Es el mismo sistema el que clasifica a la marihuana como sinónimo de delincuencia, de casos perdidos, de adicción y de maldad. La gente cree que un adolescente que fuma marihuana es partidario de salir a las calles a robar para conseguir más. Así como otros creen que por consumir marihuana el cuerpo exigirá otras drogas más fuertes, lo cual es total y absolutamente absurdo. La mayoría de las personas meten en la misma bolsa a drogas sumamente perjudiciales para la salud y adictivas, tales como la cocaína, heroína, pasta base o crack y a la marihuana, y es ahí donde aparecen ciertas confusiones. El sistema, los medios de comunicación clasificaron así a la Cannabis, y la gente, el pueblo, lo aceptó, ¿será porque vivimos en una sociedad ignorante, indiferente? Como había mencionado antes, la Cannabis acompaño a la humanidad a lo largo de miles de años y en diversas culturas como fuente de fibra, alimento y remedio. La mención más antigua conocida hasta ahora de las propiedades terapéuticas de la Cannabis es la que figura en el libro Medicina China Pêntsáo Ching que data del año 2.700 a.C. donde se recomendaba su uso para la falta de memoria, dolores reumáticos, estreñimiento, molestias femeninas, malaria y beriberi.
Así figura en casi todos los manuales médicos actuales siempre asociada con el alivio e incluso sanación de diferentes males, tales como asma, glaucoma, tumores, vómitos, epilepsia, artritis, herpes, estrés, migrañas, insomnio, falta de apetito, malestares en embarazos, esclerosis múltiple, anorexia, dolor y Mal de Crohn.
La Cannabis puede utilizarse de forma periódica o continuada sin que ello comporte disfunciones psíquicas o sociales. El término “dependencia”, con todas las connotaciones que conlleva esta mal empleado para muchos de los casos de consumo de Cannabis, ya que el consumo de forma periódica o continua no produce dependencia física, sino psíquica, por lo tanto no existe síndrome de abstinencia cuando se detiene su consumo. Y es una de las pocas drogas que no provoca tolerancia (necesidad de aumentar la dosis para lograr el mismo efecto).

Estamos frente a un estereotipo de la Cannabis que ha creado la sociedad. Lo ideal seria que las personas investiguen, se informen sobre este consumo, esta cultura, esta forma de vida. He aquí el problema, las personas realmente están interesadas en informarse, o prefieren quedarse en su estado de ceguera, de ignorancia permanente…?


Ana Graue

No hay comentarios: